La base de esta frecuencia es el movimiento de la Tierra alrededor del sol, que tarda unos 365,2421905 días.

Este ritmo del año terrestre es como los seres vivos experimentamos el sol en la tierra. Este ritmo crea las estaciones y provoca el ritmo respiratorio del aura terrestre que se muestra en la naturaleza y en la vida emocional del hombre.

En la India antigua, este sonido se llama Sadja, el padre de todos los demás sonidos, o también conocido como OM.

Las entonaciones de mantras que contienen este sonido, se celebran en las prácticas de meditación desde hace miles de años con maravillosos efectos espirituales.

Es el sonido más importante de la naturaleza y que experimentamos a nuestro alrededor.

Es el sonido del corazón de la naturaleza y relacionado con el Cuarto Chakra.

Esta frecuencia calma y relaja profundamente. Ayuda a aceptar sucesos externos, los cuales son armonizados para mejorar su integración. El corazón es el sol del cuerpo y la mitad de lo que somos. El núcleo de la mente reside en el corazón. Si el hombre es algo, entonces el hombre es corazón. Es donde reside la conciencia. Es un lugar con idealismo, fuerza de carácter y un punto de encuentro del yo inferior y superior con funciones básicas de circulación, compensación y protección.

¿Puedo aplicar este cuenco tibetano y su frecuencia individuamente y fuera de terapia?

Los cuencos tibetanos frecuenciales pueden utilizarse individualmente.

Esta frecuencia es la mejor frecuencia que podemos aplicar en el Chakra del Corazón o Cuarto Chakra de cualquier persona o ser vivo, ya que la relaja y armoniza profundamente.

La frecuencia del Cuenco Tibetano OM, también es universalmente útil a lo largo de todos los Chakras y el Aura al completo.

Combinación con otros Cuencos para Terapia

 La combinación de los Cuencos Planetarios Om y Moon aporta:

• Este sonido nos ayuda a saber, con certeza y claridad, lo que sentimos.
• Aporta fuerza emocional, vivir en conexión con la percepción interna se vuelve natural y fácil.